Maquetas de coches antiguos

En la Jornada Cultural del 25 de marzo de 2010, y durante los recreos de la siguiente semana de Semana Santa, hemos podido mostrar las maquetas de un artesano de la re-utilización. Se trata de José Porto Neira, artista fallecido pero de procedimientos de trabajo muy vivos y actuales.

De él hemos conocido dos nietos -Carlos y Salvador- que estudiaron en el Centro, y también a su nuera Carmen pues ha sido quien se ha encargado de la cafetería desde su inauguración hasta el curso 2009-10.

Nos han comentado, su nuera Carmen y su hijo Carlos, que fue una persona muy reflexiva a quien gustaba anotar sus conclusiones (en la exposición se pudieron leer algunas que estaban recopiladas en una carpeta) y que tenía gran paciencia. Esto es fácil de comprobar en el acabado y minuciosidad de sus obras. También era una persona muy ordenada. Tenía un taller muy organizado con todos los materiales e instrumental clasificado y colocado. Esta es una cualidad muy valorada para trabajar con eficiencia en cualquier taller.

En la fotografía podemos ver dos modelos de los 9 presentados en la exposición. Para hacernos una idea del tamaño, la longitud de estas maquetas es de unos 30 cm. Pesan bastante, pues los materiales son principalmente metal de piezas industriales. Y tienen el aspecto de piezas de mecano. Están construidos con bisagras, manetas, palometas, llaves, hebillas, bombillas de linterna... Muchos asientos han sido tallados en madera y con pirotécnica se les ha dado el aspecto de cuero viejo. Algunos se completan con retales de tela u otros materiales.

Si se quiere hacer una visita virtual a la exposición se puede ver el vídeo montado a partir de unas fotografías de la misma.

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Guada 2010

Coordinadora de Luz Medioambiental

Aves muy puntuales

Es muy posible que te hayas fijado en que diariamente, y a la hora del recreo, se posan por el Instituto una cantidad de aves que empieza a llamar la atención. Lo que más abunda en el grupo son las palomas, pero también nos visitan unas cuantas gaviotas y otras aves más pequeñas, como los gorriones.

El motivo es fácil de deducir, vienen a almorzar y por ello se han adaptado a nuestro horario, sin necesidad de utilizar reloj, por cierto. Es agradable observar estos seres a nuestro alrededor, pero no debemos olvidar que pueden

llegar a ser molestos, sobre todo si vienen demasiados para el espacio que hay para compartir. Además, se corre el riesgo de recibir el impacto de un proyectil mal oliente.

En noviembre de 2007, varios alumnos de diversificación del Instituto hicieron un recuento que documentaron en un vídeo con su profesor Julio César García Ruiz. Ver vídeo contando palomas en el IES.

Para evitar que aumente el número de aves, es conveniente que no se les entregue demasiada comida. Está bien que las migas sean aprovechadas por estos seres, sin embargo no debemos desperdiciar nuestro almuerzo dejando caer más de la cuenta. En muchas ciudades el exceso de palomas causa enormes problemas de suciedad en edificios y calles. Es decir, demasiadas pueden ser consideradas como una plaga. En los basureros y estercoleros se tienden a reunir y si son espacios controlados se aplican medidas para reducir su número. En COGERSA, por ejemplo, tienen halcones que las cazan al vuelo.

El equilibrio natural necesita una variedad de seres proporcionada y en su hábitat adecuado.

Guada. 2010

Coordinadora de Luz Medioambiental

Plantas mimadas en Conserjería

El espacio de Conserjería de nuestro Instituto -como de la mayoría- se caracteriza por el ruido de fotocopiadoras, el trasiego de personas, el sonido del teléfono, la acumulación de objetos. Sin embargo, este transmite una sensación agradable e incluso relajante. El espacio es luminoso, tiene vistas al jardín del Centro y esto ha inspirado al personal de Conserjería.

Siempre han apreciado a las plantas y a menudo han tenido alguna junto a ellos, pero este curso además las plantan, las trasplantan y las acogen. Cuando han visto alguna un poco decaída, se han encargado de cuidarla hasta que ha podido regresar a su territorio. Otras, como los mangos las han ayudado a nacer y las han cuidado hasta poder plantarlas en macetas. Aseguran que tienen un pequeño invernadero y creen que a las plantas les ha gustado el sitio.

Nosotros, sin embargo, sabemos que lo que ocurre es que miman a las plantas. Por supuesto, las plantas de los espacios comunes en el interior del Instituto, se benefician de los cuidados del personal de Conserjería, pero también de los dedicados por el personal de mantenimiento y de administración. Por ello, desde aquí queremos manifestar nuestro natural agradecimiento, en nombre de estos silenciosos y agradables seres.

Guada, 2010

Coordinadora de Luz Medioambiental